miércoles, 18 de julio de 2007

Hasta nunca, hasta mañana

Al venir al mundo te despediste de la libertad etérea, siendo saludado por esta excentrica, sino materialista, vida. Naciste para continuamente ser olvidado, para ser recordado, y conocido. Quien te conosca te olvidara, quien te olvide, sera olvidado.

Al pasar por tu epoca dorada fuiste despedido por amigos, encontrando otros, olvidando a los que te olvidaron, siendo olvidado por los que olvidaste. Digno circulo al cual pertenecemos.

Al final de tu vida, te despediras de todos, quieras o no quieras, esperando que vuelvas a ser saludado al lugar al que vayas, y rogando no ser olvidado como en tu vida insignificante.

Es asi, como yo sere uno de los tantos que te dira adios, esperaré ser olvidado, porque yo procuraré olvidarte; sere aquel que marcó tu vida y se fue; fuí el decidido para tí, pero me desperdiciaste. Asi que soy tu todo, pero ahora soy tu nada.

Adios, nunca te conocí, adios y hasta nunca, mañana te veré

3 comentarios:

N.J.Sophie dijo...

Xavo... xavo... Si así es... la vida es un constante círculo de "holas" y "adiós" ya uno no sabe cual duele más o cuál es más difícil.
E caso es que entre el olvido y la trascendencia creo que todos buscamos lo segundo. Yo lo hago, por eso escribo, por eso intento dar consejos, por so planeo tener hijos. El olvido... a veces tan necesario y a veces tan jodido de alcanzar...

Renato Constantino dijo...

¿Debemos olvidar o ser olvidados? Decía Neruda en su "Oda al hombre sencillo" que había que aprender a ser apellido olvidado. En realidad, debemos acostumbrarnos al olvido de la gente. Y aprender. Ambas tareas son difíciles. Pero llega la hora en que hay que afrontarlas. Aprende, pues es la única manera en que puedes esperar ser alguien trascendente.

Anónimo dijo...

fuck you!